Tradicionalmente, seguramente cuando pienses en muebles te vendrá a la cabeza la madera como material de fabricación. Pero la innovación en el diseño e investigación de materiales ha hecho que en las últimas décadas se empleen muchos otros.

En esta nota vamos a hablar de 3 productos que se usan para muebles: madera maciza, tableros enchapados en madera y melaminas.

Muebles de madera maciza

Cuando hablamos de madera maciza hablamos de muebles nobles, pero tenemos que ser realistas, cada vez hay menos madera y la que hay tenemos que exigir que sea de árboles talados en bosques sostenibles.

Pocos muebles hoy en día son de madera maciza, los más comunes son los de pino, utilizado principalmente para estilo rustico en el que los nudos y pequeños golpes y desperfectos forma parte de este estilo.

La madera maciza se utiliza en partes o muebles que necesitan  una gran resistencia al peso, tales como sillas o esqueletos de tapicería, entre otros. Algunas maderas que vendemos son laurel, zoita, guatambú, paraíso, peteribi, cedro, roble, haya.

Es madera auténtica y viva y, por tanto, este mobiliario será el más delicado de los 3. A la vista y al tacto resultan más atractivos y aguantan mejor el peso pero también son mucho más delicados al fuego, la humedad, el sol… por tanto requiere de un cuidado más atento. Con un cuidado apropiado, la durabilidad de estos muebles es mayor.

Muebles enchapados en madera

Son tableros de MDF o Aglomerado recubiertos de chapa de madera. Son muebles de menor precio que los de madera pero de mayor que los de melamina.

Visualmente es igual al mueble de madera maciza pero más económico. Podés elegir entre un amplio abanico de acabados y son menos delicados que los de madera maciza.

La chapa es un producto natural y más elegante, a la hora de fabricar los muebles llevan muchos más procesos. Hay que tener cuidado desde la clasificación de los tableros para igualar chapas y colores, casar mallas para que sea más uniforme agradable a la vista, el proceso de fabricación es más elaborado, hay que lijar, fondear, lijar, dar color , lijar y luego dar acabado. Todos estos procesos se tienen que hacer con mucho cuidado para que no se marque y rayen las caras. En la manipulación de las piezas suelen intervenir siempre dos operarios cuando en la melamina no es necesario.

Muebles de melamina

La melamina es la chapa que recubre el aglomerado o el MDF, es un tipo de material plástico compuesto por resinas que se emplea para revestir muebles y se caracteriza por ser dura y resistente al calor. Consiste, en definitiva, en un recubrimiento que va pegado.

1. Económico
   Sobre todo si los comparamos con los muebles de madera maciza, que al provenir directamente del árbol y al requerir de un proceso de elaboración que precisa de un tratado más cuidado hace que se incremente su costo.
2. Resisten la humedad
3. Resistente al rayado
4. Resistencia al sol, al fuego y aislante térmico
5. Aislante acústico
6. Resistencia a los parásitos o microorganismos
7. Muy resistente a los detergentes y a los agentes químicos
8. Amplia posibilidad de colores, incluso se puede imitar la madera
9. Diferentes texturas: rugosa, lisa, mate, brillo… con diferentes motivos
10. Es muy fácil de limpiar, ya que está polimerizada, por tanto el agua no puede entrar fácilmente en el aglomerado, aún así te recomendamos que utilices paños húmedos y no demasiado mojados para limpiar la superficie ya que si los bordes no están protegidos pueden filtrarse en el aglomerado, perjudicando así la calidad del mueble.

Hay que tener en cuenta también que tanto la madera maciza como los enchapados deben ser barnizados, mientras que la melamina no; ya que es una lámina sintética que simplemente va pegada. Además, estos dos son más delicados que la melamina, tanto para el fuego como para los golpes, el paso del tiempo o incluso para limpiar.